Bien lo expresaba el dicho y hasta
estos días lo confirmo: como esté tu cuarto, está tu mente. En
mi caso aplicaría: como esté mi cuarto va
a estar mi vida. Ya que durante este fin de semana me la viví arreglando
todo lo que pude y realizando el mayor número de tareas posible, entre ellas la
primera exposición evaluativa del semestre – la cual, debo agregar, fue muy
buena –.
No hay comentarios:
Publicar un comentario